Cada ensayo trae algo nuevo y éste me ha proporcionado el terminar de definir a mis dos personajes, Sam Wesson, el marginal que llevará al pobre Edgar a la perdición, y el doctor Snodgrass, que certifica su triste final.
Y ambos los he construido partiendo de lo misma técnica, propuesta por Alberto hace unos ensayos, la animalización. Esta técnica consiste, ni más ni menos, en buscar a que animal se parece cada personaje. El doctor Snodgrass sin duda es un animal grande, quizá un oso. No tanto por que el sea grande, pero sí por que se ve a si mismo grande. Después, la puesta en escena demostró que sólo es una apariencia, y que su contrapunto, la enfermera que encarna Gloria, es la que pone los puntos sobre las ies a este tipo pretencioso pero sin maldad. En el escenario, el doctor Snodgrass debería parecer solemne (ya se encargará la enfermera de que quede claro lo que es) y su postura, su expresión corporal y sobretodo su voz, deben ir acordes con esta imagen. Esto es un reto para mí, es la primera vez que imposto una voz para un personaje y aspiro a que quede tan creíble como la mía propia, aunque para eso me quedan años luz, de momento.
Con el que no tuve duda alguna es con Sam. Sin duda, Sam es una ardilla. Despierto, rápido hasta la extenuación, juega con Eddy como si de una bellota se tratara. Cuando lo interpreto, procuro no olvidar la idea que lo inspira, para adecuar los movimientos, las expresiones e incluso, en la
medida de lo posible, también la voz. El gran reto en este caso es que el personaje no se parezca a ninguno de los que ya he interpretado (especialmente a Edmundo de "Muerete", que aparece en cuanto me despisto). En este ensayo también tuvimos ocasión de ver mucho más afinada la escena de la llegada de Eddy a la estación con Sergio interpretando al polifacético taquilleroconsignerocamarerococinero. Sin duda, va a ser una de las que va a quedar en la retina del público.
Ya cada vez estamos más cerca.
Seguiremos informando...
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