Continuamos con los ensayos, y mientras nos acercamos cada día más a la fecha del gran estreno de la obra, también nos acercamos al culmen de ésta.
Dotando de más dramatismo el curso de la obra, gracias al gran trabajo de mis compañeros, puedo asegurar que el público se sentirá en el mismísimo pellejo de nuestro Allan. Sentirá la misma fustracion, miedo, coraje, tristeza, soledad...
Esto lo pudimos comprobar en el ensayo de una de las escenas finales el otro día: vimos como Nacho y Sergio le daban más emoción a ese momento. O en otra escena en la que sale Nacho con Gloria: los ciudadanos de aquella época rechazan ayudar a Allan por pensar que es un simple borracho, haciendo que en este momento el público se sienta completamente inútil desde su asiento y deseoso de subir al escenario y ayudarlo.
Así pues, puedo asegurar que llegaremos al público y aunque, como ya he dicho, la fecha del estreno se acerca y eso debería significar más nervios; por lo contrario, estoy completamente tranquila, porque tengo plena confianza en el trabajo de mis compañeros y , por supuesto, de nuestro director.
Bego